Estimulación física

Se trata de practicar cualquier tipo de deporte adaptando el material, el emplazamiento y las órdenes, al diferente grado cognitivo que presente el grupo de personas mayores usuarias. Las personas mayores usuarias potenciarán todas las esferas físicas que la actividad en concreto les proporciona, sin minusvalorar la motivación y el refuerzo positivo que les supone.

A través de distintos ejercicios y movilizaciones, favorecemos la buena salud de las articulaciones, y conservamos su rango articular en parámetros de normalidad. Los ejercicios pueden variar desde lo más simple, como realizar repeticiones de cada articulación en cada plano de movimiento, hasta lo más complejo, incluyendo varias articulaciones a la vez o usando material de trabajo. Estas movilizaciones se pueden realizar de forma activa, activa-asistida o pasiva.

Mediante el uso de material lastrado, como son las mancuernas, pesos, lastres, u otro material que ofrezca resistencia activa, como theraband o fitband, potenciaremos la musculatura de miembros superiores e inferiores. Son actividades que se pueden realizar de manera estricta o adaptada, siempre respetando el deterioro de la persona mayor usuaria, bien sea físico o cognitivo. Se trabajarán ejercicios guiados por tiempo en series de fuerza y alto número de repeticiones. Con ello se potenciará tanto la musculatura profunda, como la superficial, proporcionando importantes beneficios a nivel locomotor.

La calistenia es un conjunto de ejercicios centrado en la contracción y movimiento de los grandes grupos musculares. El objetivo es desarrollar la agilidad, la fuerza física y la flexibilidad. Dentro de la actividad en grupo, las personas mayores usuarias realizan un calentamiento de los grandes grupos musculares, y se establecen series de ejercicios que incluyen gran número de repeticiones, poniendo más énfasis en abdomen, glúteos, brazos y piernas. Este método repercute favorablemente en la postura y forma corporal, reduciendo el riesgo de lesiones, ya que se caracteriza por la ausencia de saltos, rebotes e impacto. Sentadillas, fondos en pared o en silla, son algunos de los ejercicios que realizamos.

Se trata de actividades físicas recreativas, en las que el grupo de personas mayores usuarias disfruta haciendo ejercicio. Son actividades grupales que fomentan la participación activa y la cohesión del grupo, parte fundamental dentro de la dinámica de los Centros de Día STIMA, además de beneficiarse de la parte física que vayan a trabajar, dependiendo de la actividad. La mayoría de estas actividades se realizan a través de  juegos que suponen un esfuerzo físico, coordinación, ejercicios de psicomotricidad con pelotas, aros, fitballs, etc, así como otros ejercicios que además trabajan el aspecto cognitivo, y el aumento de la tolerancia al esfuerzo.

En general podemos concluir que  el ejercicio físico guiado, y adaptado a las necesidades de cada persona mayor usuaria, ayuda a controlar los factores de riesgo y minimiza los síntomas de determinadas patologías.