Las vértebras aplastadas, o fracturas por compresión vertebral, son una lesión común en personas mayores que se origina por traumatismos o como consecuencia del debilitamiento y fragilidad de los huesos por osteoporosis.
La fractura de vértebras aplastadas se diagnostica mediante radiografía, TAC, resonancia o una densitometría (para evaluar el estado del hueso y determinar la posibilidad de que se produzcan más aplastamientos vertebrales).
Estas fracturas pueden causar dolor intenso y limitar la movilidad de las personas mayores afectando gravemente a su calidad de vida.
Sin embargo, si se incorporan hábitos de vida que prevengan de su padecimiento, y con el conocimiento de su sintomatología, es posible evitar dicha fractura y favorecer a una posible recuperación.
¿QUÉ FACTORES INFLUYEN EN LA FRACTURA DE VÉRTEBRAS APLASTADAS?
En el origen de las vértebras aplastadas pueden existir diferentes causas, entre ellas, las principales son:
- Osteoporosis: fruto del envejecimiento, los huesos se ven expuestos a un mayor debilitamiento y a una fragilidad que aumentan el riesgo de que la persona mayor sufra fracturas en ellos.
- Traumatismos: en línea con el punto anterior, las personas mayores que padecen de osteoporosis pueden sufrir con más probabilidades caídas o golpes. Asimismo, también los accidentes de coche son una causa importante en el origen de la fractura de las vértebras.
- Traumatismos espontáneos derivados de un estornudo, tras hacer un esfuerzo al levantar peso o al cogerlo.
- Sedentarismo: la falta de ejercicio físico hace que la musculatura de las personas mayores esté menos desarrollada y, por lo tanto, que sus huesos estén menos protegidos ante previsibles lesiones.
¿CUÁLES SON LOS SÍNTOMAS DE LAS VÉRTEBRAS APLASTADAS?
- Dolor agudo en la parte baja de la espalda como consecuencia de un golpe, del levantamiento de peso, de una flexión severa o por la realización de las tareas del hogar. Aunque el dolor puede estar localizado en un punto de la columna, este puede extenderse al abdomen o la pelvis.
- Dolor crónico que suele estar asociado con la lumbalgia y puede derivar en contracturas musculares.
- Disminución progresiva de la estatura que puede llegar a ser de entre 20 centímetros como consecuencia del aplastamiento de las vertebras.
- Curvatura de la espalda hacia adelante, conocida como cifosis.
- Disminución de la capacidad pulmonar y con ello se experimenta una mayor dificultad para respirar correctamente o mayor predisposición a las fatigas.
- Pérdida de equilibrio y coordinación, y con ello, dificultad para caminar y una mayor predisposición a las caídas.
- Problemas digestivos e intestinales.
¿CÓMO PREVENIR Y TRATAR LAS VÉRTEBRAS APLASTADAS?
- Ejercicio físico y rehabilitación acorde a las necesidades y objetivos de cada persona mayor y sujeto a un plan personalizado diseñado por profesionales en diferentes áreas gerontológicas. Se recomienda la práctica de ejercicio físico todos los días durante 30 minutos. En nuestros Centros de Día diseñamos un programa de ejercicios específicos para el fortalecimiento de la espalda con el objetivo de mejorar la fuerza, la movilidad o la coordinación, entre otros.
- Tratamiento específico de la osteoporosis: si la persona mayor padece de ello es recomendable seguir un tratamiento que minimice su impacto en la vida de la persona mayor y pueda prevenirlo de padecer futuras fracturas.
- Corrección postural: en el marco de las actividades de la vida diaria (AVD) los profesionales de nuestros centros enseñarán a las personas mayores a cómo realizar dichas tareas (asearse, alimentarse, preparar la comida, pasear, recoger / colocar objetos, etc.) velando por una correcta postura en su realización.
- Dieta saludable: incorporar como hábito de vida una dieta rica y variada con el consumo de pescado, legumbres, carnes, frutos secos, frutas, lácteos, etc. con fuerte aporte en Vitamina D, calcio, magnesio, fósforo y zinc. En ella se contempla recudir el consumo de alcohol y evitar el tabaco.
- Tratamiento farmacológico prescrito por el especialista y tratamiento quirúrgico según indicación médica. En el tratamiento quirúrgico se contemplan diferentes vías, por ejemplo: la cifoplastia, la vertebroplastia o la elastoplasia.
Prevenir el padecimiento de una fractura por vértebras aplastadas es posible siguiendo las indicaciones de los profesionales y especialistas que velarán por el bienestar y la calidad de vida de la persona mayor. Si quieres conocer más sobre rehabilitación de fracturas en personas mayores, descubre nuestros Centros de Día, ¡puedes visitarnos o contactar con nosotros!